Después de mucho y mucho tiempo oyendo a montones de personas decir que Quentin Tarantino y sus películas son la ostia, y que ver sus películas da un concepto diferente del cine, decidí ver algunas de sus películas.
La primera que vi no hace más de dos semanas, fue la de Pulp Fiction, una película aclamada por gran parte del público. Personalmente, es una película que está bien, con buenos guiones, buenos actores interpretando sus papeles y una trama entretenida por sus varias historias. Hasta aquí puedo decir que es una película buena, y que destaca por tener un argumento atrevido e interesante para su público, pero, hasta aquí llego, no puedo decir muchísimo más de esta película que tanto furor ha causado con el paso del tiempo. Sí que es cierto que incorpora un poco el concepto de empezar la película por la cola e ir añadiéndo escenas hasta montar la película en sí, pero es algo que he ido viendo con el paso del tiempo en otras películas, y es por eso que no me acaba de sorprender, aunque es muy posible que en el año 1994. que es cuando se vio por primera vez en las grandes pantallas, fuera algo novedoso e impactante, pero por lo demás no incorpora nada que no haya visto hasta ahora, es por eso, que después de montar unas grandes expectativas sobre Quentin y su película, me quedo con un buen sabor de boca pero no con el tan aclamado saber que esperaba.
De todos modos, como bien he dicho, su película me gustó, y me enzarcé a descubrir su famosa y más «moderna» película, la de Kill Bill. Así que el fin de semana pasado, me encontraba en el Fnac de Barcelona, y ante su gran selección de títulos a precio «low cost» encontré Kill Bill Volumen 1 y 2 a un precio justo, así pues, una de mis compras en el centro fue la de esas películas (queda pendiente conseguir la de Pulp Fiction, pero poco a poco, no hay que hacer compras de las grandes como la que me dio por hacer este fin de semana pasado).
Este mismo fin de semana tuve la oportunidad de verlas, y sigo destacando lo mismo que la primera película que vi de Tarantino: destaca por muchas cosas que he visto ya en bastantes películas, y no acaba de sorprenderme, pero de todos modos me gusta ver de vez en cuando películas que se salgan de su guión habitual.
Kill Bill destaca sobretodo por estar montada en pequeñas partes, en pequeños capítulos, por sus escenas en dibujos animados, sus guiones en el idioma del público o en voces subtítuladas, su brutalidad en algunas escenas, la filmografía en blanco y negro y la exageración exasperada de algunos detalles.
De todas maneras, doy una nota positiva, y aunque no es el mejor director, destaca por algo que no todos tienen: la manera diferente de hacer las cosas y la personalidad en sus películas.
Ahora bien, esto es una pequeña opinión, no se trata de una crítica profesional, pues no quiero que los segidores de Quentin me salten a la yugular, pues mi intención es simplemente la de comentar de manera superficial todo lo que me ha conseguido transmitir este director en una primera pasada. Sé que hay muchos más detalles y características y escenas importantes que no he llegado a comentar ni por asomo por aquí, pero lo que quiero mostrar es que simplemente sus películas me han gustado y que han roto con la rutina que estoy acostumbrado a ver.
