Vaya programón que se han sacado los de telecino, a veces, me quedo sin palabras.
De Buena Ley, por si nunca lo habéis visto, es un «programa» (o show, o estupidez aguda) que ofrecen entre las 14.30 y las 15.00, un espacio muerto que rellenan por lo que veo con cualquier gilipollez (vaya estoy empezando a calentarme y ni tan siquiera os he contado nada de lo que opino, pero de esta manera podéis ver algo de indignación en mi).
Pues bien, este programa trata de lo siguiente: juicios para el público. Dos personas, denunciante y denunciado van al plató, donde supuestamente se encuentra un juez-mediador que escucha la «demanda del demandante y la defensa del demandado». Si no hay acuerdo por ambas partes, y el juicio se tiene que dictaminar, por tanto, el juez se retira a «meditar» para llegar a un veredicto. Mi
entras tanto, en un cuarto de hora aproximadamente, el público tiene derecho a opinar, criticar y defender para convencer o hacer el «juicio por su mano propia», aunque luego es el juez el que dictamina, no lo olvidemos.
Hasta ahora, me podríais decir: pero a ver, ¿qué tiene de malo todo esto? Bien, ya voy. Este programa me parece un show y un entretenimiento para un público estúpido y con eso me entederéis cuando veáis los casos que se exponen.
Todos los temas que se exponen (es decir, todas las denuncias), si eres una persona mínimamente inteligente y con cuatro dedos de frente, sabrás la respuesta (es decir, sabrás el veredicto, y eso ¡sin ser juez!). Y la cosa no queda aquí, pues encima, tienen un público fichado (que va día sí y día también) los cuales defienden o se oponen al denunciante. Y si nada más empezar tenemos claro el veredicto, pues escuchar a estas personas debatir sobre algo tan simple como 2+2 son 4 pues… Pone bastante nervioso y te llega a sacar de tus casillas.
Eh, y ahora viene lo mejor, pues antes de empezar a crear mi opinión, he googleado un poco y he abierto los primeros enlaces referidos a «De Buena Ley» y dicen que los denunciantes y denunciados es posible que…¡Sean actores! Mira, eso intento no planteármelo, porque si en este mundo existe gente tan… En fin, no sé si seguir por este camino, pues no voy de listo, ni alardeando de lo que soy, simplemente que no tolero las estupideces. Resumiendo, soy una persona con cuatro dedos de frente.
Así que este «programa» (si se merece este nombre) lo considero como un «Diario de Patricia«. Es decir, un programa para reirse de la gente que va allí (tanto el público que opina, sobretodo el que lo hace erróneamente, como el demandante y demandado). ¿Pagaran o no pagaran a esta gente por decir tantas estupideces juntas? No lo sabemos pero, ¿lo bien que nos lo pasamos riéndonos de esta gente? Eso sí, por favor, cambiar el nombre del programa y lo llamáis «De Buen Cachondeo» o, reiterando e insistiendo mis palabras, ESTUPIDEZ AGUDA.
Y, como en el Diario de Patricia, siempre tendremos la duda de si las personas que acuden allí les pagan para hacer todo lo que hacen.
6 agosto, 2009
Telecinco fue la primera en decir que los los denunciantes y denunciados eran actores contratados a una agencia de actores. Para Telecinco ‘De buena ley’ es más una serie de 30 minutos completamente guionizada que un programa de juicios, por eso no les importa reconocer que son actores.
El público está contratado también y es gente que trabaja de eso, de opinar, puedes enviar un formulario desde telecinco.es para ser contratado como público opinador.
Todos los temas estan basados en hechos reales, interpretados por actores.
El programa es una mierda, eso no hay quien lo dude, pero toda la tele es así. En ‘De buena ley’ es mucho más obvio que todos son actores, malos actores de 350€ el programa, pero en todas las cadenas muchos programas son completamente falsos, interpretados por actores fracasados y escritos por guionistas fracasados.
Hasta los presentadores son fracasados, la presentadora Sandra Barneda era presentadora de informativos y el presentador Alberto Herrera era hombre del tiempo y mira donde estan ahora.
Todo muy cutre pero el programa está enganchando, hace shares del 15% y ya lo han renovado por una segunda temporada.
Y no hay ninguna duda, en el Diario de Patricia y programas similares les pagan SIEMPRE por acudir.
Hazte la idea, en la tele TODO es mentira, hasta las noticias que te cuenta en el telediario son mentira.
Bienvenido al mundo real, criatura! 🙂
6 agosto, 2009
Ante todo, como cualquier miembro que comenta en mi blog, bienvenido y espero que algunos de los temas tratados te atraigan para hacer un comentario como este.
Primero, déjame remarcar mi ignorancia al no saber que hasta telecino reconoce a puerta abierta que todos los que asisten (a parte del público normal y corriente que todo programa tiene) son actores. Como bien comenté, había leído en otros blogs que se «suponía» que eran actores pero no que la misma cadena televisiva lo confirmara.
Sobre tu aportación de que en sí «De Buena Ley es una mierda» (resumiéndolo) tanto tú, como yo, como cualquier persona decente (como bien comenté, con 4 dedos de frente) va a estar totalmente de acuerdo.
Ahora, referido a tu «frase de bienvenido al mundo real«. En teoría se puede interpretar de dos maneras, pero creo que tu intención es darle un buen toque de humor.
En otra entrada de blog, algo reciente, hablo sobre algunas injustícias que se producen en el mundo, pero, hablando siempre de forma puntualizada… La mayoría de nosotros podemos saber la «mierda» y sobretodo, «las mentiras» que se ofrecen día a día… Pero comentar algo tan complicado no es fácil de tratar (almenos para mí :D, y si fuera fácil no creo que estuviera aquí). De todos modos, en ese momento «no pensé más allá» y por tanto no quise seguir alargando el tema, pero te doy la razón sobre el mundo televisivo (del cual no me alimento demasiado).
Y nada más Javi, agradezco un comentario como el tuyo, 100% constructivo e interesante.
¡Un saludo!